El 12 de septiembre del año pasado, se cumplieron 11 años del deceso de Ayala. Y Cumbia de la Pura se comunicó con Ucedo, quien recordó la noche del asesinato.
"Yo estaba trabajando con Karakol. Me enteré esa misma noche. Lamentablemente, las malas noticias son las que corren más rápido. Nos cayó mal a todos. Esa no es manera de morir", opinó.
Según publicaron los medios, Ayala fue asesinado en Villa Caraza, Lanús, por el cabo José Luis Abregú, quien se desempeñaba en el área de Comunicaciones de la Policía Federal. El uniformado le disparó sin mediar palabras desde su auto Fiat 147, color blanco: un balazo impactó en el abdomen y otro en el brazo.
El caso, caratulado como "homicidio", fue investigado por la Unidad Funcional de Instrucción del Departamento Judicial de Lomas de Zamora. La duda fue si la agresión fue cometida en el marco de un ajuste de cuentas o si se trató de un ataque originado por cuestiones sentimentales.
En este sentido, Ucedo manifestó su incertidumbre.
"Mucha gente pensó que fue asesinado por otro motivo. Quizás fue un ajuste de cuentas. Las crónicas dicen que fue un crimen pasional. Pero solo Dios sabe lo que pasó", observó.
El perfil de Pablo Ayala, vocalista de Medialunas, quien fue asesinado de manera misteriosa en 2005.
El bajista se había incorporado a Medialunas luego de trabajar en varias agrupaciones. Para ello, tuvo que realizar un casting, organizado por Clan Music, la empresa del polémico productor peruano José "Cholo" Olaya.
"Nos hicieron una prueba. Buscaban que sea buen músico, tenga un buen instrumento, facha, pelo largo y no sea demasiado atorrante. Era difícil encontrar todo eso", concluyó.
Sin embargo, fue seleccionado y se incorporó al nuevo proyecto.
"Medialunas era una banda a la que apostaban todo. Y dio su resultado. Porque dentro de ese estilo de cumbia, con línea de guitarra y teclado, marcó una época y una diferencia", puntualizó.
Tres son multitud fue un disco que Medialunas editó en 1999, con canciones como Yo tomo y Chicas, cigarros y licor. "Ayala tenía oído, picardía y una capacidad tremenda", explicó el bajista Ucedo.
Para Ucedo, el conjunto se caracterizaba por un ánimo especial.
"Lo que tenían Pablo y su banda era que contagiaban alegría y diversión. Era un show medio alocado, con mucho salto y baile. Hasta teníamos un muchacho que se sacaba la remera y hacía un streep", describió.
Y recordó a Ayala, el vocalista, que había llegado a Buenos Aires desde la provincia de Formosa.
"Como toda la gente de provincia, era una persona dada y humilde. Un tipo muy macanudo. Estaba siempre haciendo chistes, con una sonrisa en la cara. Siempre positivo, toda la onda", contó.
"Era a todo dar. Era un laburante que contagiaba alegría. Y eso incluía los asados, las birras y el vino. Era raro verlo enojado o bajoneado. Era el típico que lo mirabas y decías: "Este es un loco y un atorrante". En el buen sentido, porque nunca le hizo mal a nadie", reseñó.
Pero además, Ucedo remarcó la inventiva de Ayala, que además de cantante era compositor.
"Pablo era el creador de las canciones. Era quien componía las letras y la melodía. No tenía idea de música, pero tenía oído, picardía y una capacidad tremenda", reveló.
En el año 2000, Medialunas editó Estamos de vuelta, a través del sello Universal Music. "Pablo y su banda contagiaban alegría y diversión", contó Anibal Ucedo.
Medialunas fue una banda que en su época generó polémica. Si bien mantenía un sonido típico de la década del ´90, con viola y teclados, sumó letras de contenido callejero y barrial.
Hubo canciones como Mi billetera, Viejita al agua, Yo tomo y Estoy de vuelta, entre otras, que significaron una instancia previa a la cumbia villera.
Estas propuestas, generadas por Ayala, generaban conmoción entre sus compañeros de la banda.
"Todos nos mirábamos y decíamos: "Che, no está un poco zarpado?". Pero a la vez nos causaba gracia. Y le dábamos para adelante. Medialunas dio un giro; se puso más atrevido, más extrovertido", explicó Ucedo.
"Tenía esa picardía y frescura para decir cosas que otras bandas no contaban. La mayoría le cantaba al amor o al desengaño. Para mí la primera banda de cumbia villera no fue Flor de Piedra, sino Medialunas", lo definió.
Ángel Anibal Ucedo, exbajista de Medialunas, recordó el paso que tuvo por la agrupación, junto al vocalista Pablo Ayala. "Era una banda a la que apostaban todo", expresó, en conversación con Cumbia de la Pura.
Estas características provocaron que Ucedo tenga un lindo recuerdo de su amigo y excompañero de trabajo. Por eso pretende que se reivindique su figura.
"Ojalá a Pablo se lo empiece a recordar como realmente se merece. Era un gran cantante y compositor. Fue una pérdida muy grande para la movida tropical", expresó.
Escuchá la nota completa acá:
La entrevista fue realizada en vivo en la tarde del sábado 17 de septiembre de 2016.
lo lamento bastante recien me entero que pablo ayala mi compoblano habia fallecido, soy de formosa y me apena mucho, porque siempre escucho sus temas.-
ResponderBorrarTroppdis
ResponderBorrar